Seguros obligatorios para empresas constructoras. Pólizas y coberturas que necesitas conocer
Las empresas constructoras enfrentan riesgos específicos derivados del uso de maquinaria pesada, grandes inversiones y la necesidad de proteger tanto a los trabajadores como a terceros.
Por ello, es imprescindible conocer cuáles son los seguros obligatorios para empresas constructoras en España, tanto por exigencia legal como por protección financiera y operativa.
Además, la contratación de estos seguros es requisito fundamental en obras públicas y, en muchos casos, en proyectos privados.
A continuación, te explico los seguros obligatorios para una empresa de la construcción y otros que, aunque no son exigidos por ley, son muy recomendables.
1.- Seguro de responsabilidad civil para empresas de la construcción
Este es uno de los seguros más importantes y obligatorios para cualquier constructora.
Su función es proteger a la empresa frente a posibles reclamaciones por daños a terceros ocasionados durante la obra.
Por ejemplo, si una grúa derriba una estructura colindante o un peatón resulta herido por una caída de escombros, el seguro cubrirá los costes legales, indemnizaciones y otros gastos derivados.
En España, este seguro debe cubrir tanto la responsabilidad directa de la empresa como la de sus empleados y subcontratistas.
2.- Seguro de convenio para construcción
El seguro de accidentes de convenio es otro requisito obligatorio.
Su objetivo es garantizar la protección de los trabajadores frente a accidentes laborales, complementando las prestaciones de la Seguridad Social.
El seguro de convenio para construcción cubre indemnizaciones en caso de fallecimiento o incapacidad, conforme a las cantidades establecidas por el convenio colectivo del sector.
La empresa debe asegurarse de que la póliza cumpla con estos mínimos.
3.- Seguro decenal del constructor
El seguro decenal para constructoras es obligatorio en proyectos de edificación residencial y está regulado por la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE).
Su función es proteger a los propietarios frente a daños estructurales que puedan comprometer la seguridad del edificio durante los diez años posteriores a su finalización.
Este seguro cubre defectos en cimientos, vigas, forjados y otros elementos estructurales que podrían suponer un riesgo grave.
El seguro decenal del constructor debe ser contratado por el promotor en cualquier nueva construcción de viviendas o rehabilitación importante. Aunque no es obligatorio para los autopromotores, es altamente recomendable.
Aunque inicialmente estaba destinado solo a proyectos residenciales, cada vez más empresas lo contratan para otro tipo de edificaciones.
4.- Seguro de afianzamiento de cantidades anticipadas
Este seguro es obligatorio para promotoras que reciben pagos anticipados de los compradores de viviendas.
Su función es proteger a los compradores en caso de que la promotora no entregue la vivienda en el plazo acordado o no cumpla con sus obligaciones contractuales.
Según la Ley 20/2015, los promotores deben garantizar mediante este seguro (o un aval bancario) que las cantidades entregadas por los compradores están protegidas hasta la entrega de la vivienda.
5.- Seguro de vehículos
Si la constructora tiene vehículos registrados a su nombre, debe contratar el seguro obligatorio de circulación, que cubre daños a terceros.
Esta póliza es exigida por la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor.
Además, es imprescindible para vehículos que operan en entornos de obra, como camiones, grúas o maquinaria pesada. El seguro protege tanto los vehículos que se utilizan para la actividad principal de la empresa como los que se destinan a actividades secundarias.
Algunas coberturas adicionales incluyen asistencia en carretera o en obra, lo que minimiza las interrupciones en las operaciones diarias.
¿Por qué son importantes estos seguros?
Contratar los seguros obligatorios para empresas constructoras es una parte fundamental de la gestión de riesgos en el sector.
Estas pólizas protegen a la empresa frente a sanciones legales, problemas financieros y riesgos operativos, además de fomentar un entorno laboral más seguro.
Por otro lado, los seguros recomendados, como el seguro a todo riesgo para construcción, ofrecen una protección adicional frente a imprevistos que pueden surgir durante la ejecución de una obra, garantizando la continuidad del negocio.
Como ves, si tienes una constructora o estás pensando en iniciar un proyecto de edificación, es fundamental que te asegures de contar con todos los seguros necesarios.
En Galia, ofrecen soluciones específicas para constructoras, garantizando un trato personalizado y condiciones competitivas.
Recuerda que los seguros no son solo una obligación legal, sino una herramienta clave para proteger tu empresa y asegurar la correcta ejecución de cada proyecto.
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